Mi última adquisición son trozos de tela, al más puro estilo pachwork. La familia “dromedieril” crece en mi vida y en mi casa. Ya tengo dromedarios pintados en el salón, otros hechos de paja y ahora de telas de colores…cualquier día adopto uno de verdad!!
En el pueblo y Oasis de Tiserdmint y junto a nuestros antepasados fósiles, me llevo a casa esta pareja de dromedarios molones hechos con trozos.
Trozos de tela, trozos de colores, trozos de alambre y trozos de ilusión-diversión-juego-habilidad-alegría…que se escapan entre los dedos de los pequeños del barrio que llegan pelados a los 6 años, algunos ni eso.
Los niños del pueblo los piensan, los hacen y los ofrecen a todo el que se acerque a ver los fósiles grabados en las rocas. La inocencia del momento está servida en un gran turbante colocado en el suelo con todo el “material” expuesto a vender.
Había muchos y muy lindos, pero tocaba elegir entre todos.
Dromedarios, vaya tela tienen…!!!